Deberíamos ser donadores de organos o no?

El día de hoy vamos a hablar un poco del vehículo que usamos durante nuestra estancia en la tierra.

Ese mi compadre me llamó para para contarme que finalmente fue a ponerse en orden con las autoridades y que fue a sacar su licencia. Después de varios intentos, logró pasar los examenes y que finalmente le preguntaron que si quería ser donador de organos... “Hagame el favor compadre” -me decía- “Si lo mío es mío, ya parece que voy a dejar que anden repartiendo lo de uno ahí por ahí con quiensabe quien ah! Claro que los mandé allá muy lejos, nomás eso me faltaba”

Ah que mi compadre, lo bueno es que siempre me habla, me cuenta sus cosas y luego me escucha, bueno, pues hablamos de este cuerpo. Cuando nosotros fallecemos, hay órganos y partes vitales, que pueden convertirse en vida para otra persona, y la verdad de la cosas, a donde nosotros vamos, ya no los vamos a necesitar. Venimos del polvo y hacia el polvo vamos. Nuestra estancia en la tierra es temporal y este cuerpecito solo lo necesitamos mientras estemos vivos.

Y ahí les dejo esta pulga en la oreja: Yo en lo personal creo que todos debieramos ser donadores de organos y de esta manera poder llevar vida a otros aún a través de nuestro viaje a la eternidad.