Hoy vamos a responder una pregunta que me hicieron por medio de mi blog. La pregunta decía: “Yo tuve una infancia con muchas limitaciones, y ahora tengo lo necesario para darle a mi hijo todo y que no le falte nada, pero me dicen que no debo darle todo, Usted que cree?” Esta pregunta, creo yo que es muy importante, ya que tenemos que ser cuidadosos con lo que les damos a nuestros hijos y lo que realmente necesitan. Tengo un amigo, que sus padres se divorciaron cuando el era chico y su papá le dijo que a él nunca le faltaría nada, sin embargo, le faltó lo que él mas necesitaba, su papá. Cuando le damos a nuestros hijos todo lo material que piden, entonces ellos pueden crecer sin aprender a apreciar el valor de las cosas, se podrían volver egoistas y centrados en si mismos.
Es más fácil que se aparten de la senda del bién, ya que están acostumbrados a recibir todo lo que quieren.
En cambio tenemos que ser abundantes y generosos con su mayor necesidad, que es nuestro amor, nuestro tiempo, nuestra atención.
Y ahi les dejo esta pulga en la oreja: El que no establece límites amorosos con sus hijos, está creando un futuro infeliz y desastroso para ellos. Vale más una buena palabra de amor, que todos los regalos del mundo.
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Saludos