El otro día, mi compadre el pocaluz me decía que a veces le daban ganas de mandar a su hijo a hacerse una lobotomía. “Es que es muy agresivo y dicen que con eso se pondría como sedita compa” No pude evitar el reirme con su comentario y le platiqué de una pelicula de ficción que se salió en 1971 llamada
Naranja Mecánica donde al protagonista le hacen una lobotomía y desaparece su agresividad pero también pierde su capacidad de interactuar socialmente.
Y ahi les dejo esta pulga en la oreja. Nuestras reacciones son parte de nuestro instinto de supervivencia y el controlar nuestro temperamento debe venir de adentro de nosotros y de la búsqueda de nuestra paz interior. Si renovamos nuestro pensamiento podemos lograr cambios en nuestras reacciones y darnos la oportunidad de aprender algo nuevo cada día
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